
REDACCIÓN
ORO NEGRO
La petrolera italiana Eni decidió trasladar a su plana gerencial de México a las oficinas centrales en Roma. Se debe al rebrote de Covid-19 que azota a la capital del país y una serie de situaciones que exponen un sistema de salud privado también saturado.
Hace dos semanas dos directivos de la compañía en México contrajeron el virus. A pesar de contar con los mejores planes en clínicas privadas, hubo una fuerte demora para conseguirles camas y oxígeno. La solución al cuadro médico fue poco convencional y por eso la compañía decidió cerrar la oficina en CDMX y enviar a 40 empleados nuevamente a Italia.
Habrá consecuencias internas. Según se comenta en el sector petrolero, Carmine de Lorenzo, titular de Eni en México, podría ser o bien removido del cargo durante enero y simplemente sancionado y multado por sus jefes en Italia.
Es un dato político y económico porque Eni es de las pocas empresas extranjeras que operan en México en energía que tiene el visto bueno de Andrés Manuel López Obrador. El presidente ha recibido en Palacio Nacional a la plana mayor de la compañía y ha felicitado a la empresa en sus redes sociales.
Eni está produciendo petróleo en México, que es lo que López Obrador les achaca de no hacer a otros gigantes del sector que llegaron con la reforma energética. La Política On Line