
REDACCIÓN
ORO NEGRO
La petrolera alemana Wintershall Dea confirmó que el 25 de marzo es la fecha límite para que entre los socios del proyecto Zama se logre una unificación con el yacimiento vecino de asignación Amoca-Yaxche de Petróleos Mexicanos (Pemex), misma que se encuentra en una etapa de negociaciones dado que los socios tienen ideas distintas sobre cómo dividir el campo y quién puede operarlo.
Al respecto, Mario Mehren, Director General de Wintershall Dea, (que entró en el consorcio que tiene un contrato en el bloque 7 otorgado en la Ronda 1.1 al adquirir a la mexicana Sierra Oil and Gas) dijo en conferencia que igual que cualquier petrolera estaría dispuesta a convertirse en el operador del proyecto conjunto con Pemex, porque el operador actual del contrato es la estadounidense Talos Energy mientras que la asignación la opera Pemex y se deberá elegir un operador para el yacimiento unificado.
“Si nos lo preguntan, obviamente, como cualquier petrolera, diríamos que sí queremos operarlo, pero es una pregunta que no nos han hecho”, dijo el directivo, “tenemos las capacidades técnicas y operativas para desarrollar todo el potencial de este bloque, pero sólo hablo en el terreno de lo teórico”.
Para la empresa alemana, que en México opera además uno de los dos contratos en asociación con Pemex que fueron otorgados en yacimientos terrestres en procesos de farmout en el campo Ogario, lo importante será llegar a un reparto justo de la participación en el yacimiento unificado de Zama, en aguas someras, y así arrancar hacia el desarrollo más óptimo del campo el próximo año.
El yacimiento Zama fue el primer descubrimiento de hidrocarburos realizado por un operador distinto a Pemex tras la apertura del sector y se dio gracias a los trabajos realizados por el consorcio liderado por la estadounidense Talos Energy y sus socios Sierra Oil and Gas, posteriormente adquirida por Dea Deutsche Erdoel; que a su vez se asoció con Wintershall formando al gigante petrolero Wintershall Dea, y la británica Premier Oil.
Se ubica a 70 kilómetros de Dos Bocas, Tabasco, en la provincia petrolera de las Cuencas del Sureste del Golfo de México, a un tirante de agua medio de 150 metros. Fue descubierto tras la perforación del pozo Zama 1, en mayo de 2017, mismo que costó 43 millones de dólares aunque el programa de exploración del Bloque 7 contempló un total de 250 millones de dólares por parte de los operadores.
El pozo Zama 1 fue perforado a lo largo de 57 días mediante un taladro semisumergible de tecnología estadounidense Ensco, para alcanzar una profundidad aproximada de 4,000 metros, donde hubo éxito gracias al hallazgo de crudo ligero.
Sus recursos prospectivos en espera de caracterización suman entre 400 y 800 millones de barriles de petróleo crudo equivalente, volumen que representa cerca del 10% de las reservas probadas del país, por lo que se ha considerado uno de los 10 descubrimientos más importantes en la historia reciente de la exploración en México. El Economista